El juez del distrito Timothy Kelly, en Washington, emitió este jueves una orden que mantiene el bloqueo a la deportación de menores guatemaltecos que llegaron acompañados de adultos a Estados Unidos. Algunos habían sido llevados a un aeropuerto de Texas a finales de agosto, pero la repatriación se detuvo antes del despegue.
De acuerdo con la resolución judicial, los casos permanecerán abiertos mientras existan solicitudes de asilo en curso. Desde agosto, iglesias y centros comunitarios en el sur de Texas han recibido a cientos de menores, la mayoría de origen guatemalteco, actualmente bajo custodia de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados.
El operativo incluyó traslados nocturnos de niños hacia aeropuertos, con vuelos programados de repatriación. La medida judicial frenó uno de estos vuelos en el último momento. Organizaciones como el Young Center for Immigrant Children’s Rights advirtieron que los menores tienen derecho a debido proceso, representación legal y decisiones individuales sobre sus solicitudes de protección.
Datos de la Oficina de Reasentamiento indican que en octubre de 2024 había 6,212 menores no acompañados bajo custodia federal en Estados Unidos, cifra que para marzo de 2025 se redujo a 2,173. Abogados y defensores de derechos de la niñez señalaron que estos procedimientos recuerdan prácticas registradas en 2018 durante la política de separación familiar.
Sectores conservadores en la frontera han defendido las medidas de la actual administración, criticando a gobiernos anteriores por la falta de soluciones permanentes. Mientras tanto, el futuro de estos menores sigue en incertidumbre entre la posibilidad de permanecer en Estados Unidos o ser devueltos a Guatemala.