El 14 de septiembre de 2025, la senadora Clara López Obregón dirigió una carta abierta al presidente Gustavo Petro en la que plantea la creación del primer “Pacto Social Vivo del planeta”. La propuesta surge tras el anuncio del mandatario de activar el proceso constituyente y busca que la ciudadanía diseñe directamente el nuevo pacto social de Colombia.
López propone que el país se convierta en la “Primera Nación de la Democracia Directa”, donde jóvenes, mujeres, comunidades indígenas, afrocolombianas, campesinos, empresarios, migrantes, académicos y artistas co-creen un nuevo modelo de Estado. La idea es que cada ciudadano tenga un papel activo en el diseño de la nueva arquitectura institucional, ecológica, económica y espiritual de Colombia.
Un aspecto central de la propuesta es la creación de una Plataforma Nacional de Inteligencia Artificial Regenerativa, concebida como una infraestructura tecnológica, humana y viva que conecte a millones de colombianos. A través de ella, se podrían recoger, traducir y visibilizar las propuestas para la nueva Constitución, con mecanismos de trazabilidad pública, deliberación inclusiva y recompensas simbólicas y educativas.
El anexo de la carta detalla la creación de un Sistema Nacional de Participación Ciudadana con IA (SNP-CIA). Este sistema integraría redes sociales, plataformas de streaming, portales nacionales y conectividad satelital para garantizar la inclusión de comunidades rurales y jóvenes. También prevé el uso de la IA para sintetizar propuestas, traducirlas a lenguas indígenas, detectar patrones y responder preguntas en tiempo real.
La senadora subraya que este proceso permitiría a Colombia co-crear y votar el primer pacto social vivo del mundo, abierto a todos los ciudadanos a partir de los 15 años. En sus palabras, “Colombia ya está lista” para liderar un modelo democrático más avanzado del siglo XXI.
La importancia del uso de la inteligencia artificial en este proceso radica en su capacidad de ampliar la participación ciudadana más allá de las limitaciones tradicionales. Según la propuesta, la IA no reemplazaría la acción humana, sino que serviría como herramienta para organizar, traducir y democratizar el acceso a la deliberación, garantizando inclusión, transparencia y equidad en la construcción de la nueva Constitución.